el vino
paseándose sobre la mesa,
rumor de
charlas mezcladas,
las migas
rodando paseanderas.
Una risa
infantil nos silencia,
al unísono
sonreímos,
giramos para
verlo,
chiquitín
de traviesa mirada,
nos observa…
En un
segundo la felicidad allí,
tan dulce y
cotidiana…
2 comentarios:
Que bonita imagen gràfica, nos regalas de aquellos instantes de tiempo, especiales y bellos, que la vida te regala y guardaras en tu memoria para siempre.
Gracias por compartir tu felicidad.
Un abrazo a la distancia.
Dulce pintura de una cotidianidad, Lía, que cambia todos los días ¿no? Un besooooo.
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